El Gobierno porteño autorizó al club a comenzar las obras en Avenida La Plata. Un avance decisivo para la vuelta a Boedo.
San Lorenzo de Almagro dio un paso clave para volver a su barrio histórico de Boedo. El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires autorizó al club a iniciar las obras en el predio de Avenida La Plata, donde funcionaba el antiguo supermercado Carrefour. Esta autorización permite comenzar la demolición de lo que queda del supermercado, paso necesario para la construcción del nuevo estadio azulgrana.
La autorización representa un logro muy esperado por el club y sus hinchas, que desde hace más de una década reclaman la restitución de esos terrenos que fueron expropiados durante la dictadura. En 2012, la Legislatura porteña sancionó la Ley de Restitución Histórica, y años más tarde el club logró comprar el predio, pero hasta ahora no podía avanzar con las obras. Esta habilitación marca el inicio concreto de los trabajos.
Aún quedan detalles por resolver, como el acuerdo pendiente con Carrefour por aproximadamente 8.000 metros cuadrados del terreno que aún pertenecen a la empresa. Para destrabar esta situación, San Lorenzo propuso un intercambio de terrenos con la cadena francesa, ofreciéndole una parcela cercana al Autódromo Oscar y Juan Gálvez. Sin embargo, esta propuesta enfrenta oposición de otro supermercado ya instalado en la zona.
El presidente de San Lorenzo, Marcelo Moretti, expresó su optimismo y aseguró que el club está trabajando para iniciar las obras en 2025. Recientemente, viajó a Colombia para reunirse con potenciales inversores y se encuentra en conversaciones con la empresa española IDOM, responsable del estadio San Mamés en Bilbao, para el diseño del proyecto.
El estadio proyectado tendrá capacidad para aproximadamente 45.000 personas y no solo será un lugar deportivo, sino que también incluirá espacios culturales y recreativos abiertos a la comunidad. Desde la dirigencia aseguran que la vuelta a Boedo será integral, fortaleciendo el vínculo con el barrio.
La noticia fue recibida con alegría por la hinchada y vecinos, que ven en esta obra un acto de justicia histórica y la recuperación de una identidad barrial fundamental. El club mantiene una fuerte relación con Boedo, que trasciende lo deportivo y se convierte en parte de su esencia.
En 2016, la Comisión Directiva de San Lorenzo aprobó que el futuro estadio en Boedo lleve el nombre del papa Francisco, hincha reconocido del club. En septiembre de este año, el presidente Marcelo Moretti retomó esta iniciativa durante un encuentro con el pontífice en el Vaticano, donde le presentó el proyecto y recibió su visto bueno simbólico, reforzando el respaldo institucional y afectivo para el regreso al barrio.
Las obras comenzarán próximamente con la demolición y marcarán el inicio de un proceso que enfrentará desafíos técnicos y económicos, pero que representa la esperanza de miles de cuervos. La vuelta a Boedo parece finalmente posible.
