martes, octubre 21

La lucha de los repartidores

 

Los y las repartidoras de aplicaciones se convirtieron en trabajadores y trabajadoras esenciales para el funcionamiento de la cuarentena. Sin embargo, trabajan en absoluta precarización laboral. Fue así que se formó “La Agrupación de Trabajadores de Reparto”, allí luchan por sus derechos desde hace tres años y le hacen frente a un difícil marco legal.

En el contexto del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio en el que se vive, la tarea de los repartidores se convirtió en esencial para el funcionamiento de la cuarentena. Los y las repartidoras de aplicaciones de deliverys o entregas viven en una situación de precarización laboral.

Marco legal
A mediados de julio, la Legislatura de la Ciudad sancionó una ley que regula la actividad de los repartidores a partir de una modificación del Código de Tránsito y Transporte que es rechazada por las y los trabajadores por encubrir la relación laboral entre las aplicaciones y sus empleados y por profundizar la precarización laboral. Lo que dice la ley es que para obtener habilitación de trabajo en la Ciudad, los repartidores deben: inscribirse en AFIP en el “Registro Único de Transporte de Mensajería Urbana y Reparto a Domicilio de Sustancias Alimenticias”; no cargar con multas de tránsito; y realizar cursos de capacitación. Todas cuestiones que correrían por cuenta propia y no por cuenta de las empresas.

La lucha

Micaela Sosa, referente de la agrupación, en entrevista con este medio digital, contó entre otras cosas cómo enfrentan la situación actual y cómo fue que lograron juntarse y organizarse para resistir. “Hace tres años que existimos como una agrupación de trabajadores de reparto. Nació apenas llegó la aplicación de «Pedidos Ya» a la Argentina. Ya en ese momento vimos que era una salida laboral más para la juventud, para los estudiantes o para migrantes, que podía ser muy provechosa pero se venían viendo un montón de problemas. Decidimos organizarnos aunque en ese momento la situación era distinta. Todos los trabajadores estaban en blanco o contratados por la empresa de «Pedidos Ya». El sueldo era malo y las condiciones laborales no eran muy buenas y lo que podíamos pelear era el aumento. El problema ahora se agravó bastante. Ahora, te puede tocar un pedido desde donde estés a cualquier zona y no hay una regulación laboral. En esta situación nacimos, al ver que si no nos organizábamos la cuestión iba a empeorar, que es un poco lo que está pasando, a pesar de nuestra organización”.

En relación a lo que plantea la ley la agrupación tiene su postura, “Lo que trató la legislatura fue una modificación en la Ley de Tránsito, que repercute en los trabajadores de reparto puntualmente. Lejos de considerarnos trabajadores de reparto y tratar de regular la actividad discutiendo con nosotros que venimos llevando cuatro paros en lo que va de la cuarentena reclamando por nuestras condiciones, (Horacio Rodríguez) Larreta (Vamos Juntos fue quien impulsó el proyecto) ve a los trabajadores de reparto sólo como bicicletas y motos. En este cuadro, es que nosotros decimos que lo que está haciendo es darle un marco legal a las aplicaciones para seguir profundizando el desconocimiento de la relación laboral encubierta a través del monotributo. Con la ley de Larreta una cantidad de responsabilidades, obligaciones y multas recaen en los trabajadores de reparto y no se ocupa de ver los derechos que nos faltan a los trabajadores. En lo que va de la cuarentena, nosotros llevamos a nivel nacional siete compañeros fallecidos y seis de ellos son en accidentes de tránsito, los caracterizamos como asesinatos laborales. Las jornadas laborales de trabajo son extensísimas. Esto de que “vos sos tu propio jefe” y que podés controlar el horario de trabajo es una mentira porque si vos tenés que trabajar hasta 16 horas por día para poder llevarte una plata que signifique algo para tu familia, no es tan así. No estás tan libre de elegir cuando trabajás y cuando no. Si te enfermás, nadie te banca la licencia por enfermedad; si no entregás, no comés”.

La repartidora, además, agregó más detalles del trabajo diario que llevan adelante y aclaró: “Nosotros no somos colaboradores, somos trabajadores de reparto y lo que hace la ley de Larreta es profundizar la precarización. Si ponés más gastos y más responsabilidades a los trabajadores de reparto, atacás a sus ingresos; si atacás a sus ingresos van a tener que trabajar más horas, no menos. Trabajar más horas implica estar más cansados, manejando por la calle, con unas aplicaciones que funcionan mal, que tienen sistemas de ranking, que te torturan porque si no contestás dentro de los minutos aunque estés manejando, te sancionan, te bloquean y no podés trabajar. Frente a todo eso, lo que hace la ley es exponernos a mayores muertes. Lo que se debería revisar es la cantidad de horas de trabajo que hay que hacer para tener un pago digno y que las empresas se hagan cargo de la obra social, de la ART, del seguro de vida, porque si no todos los gastos recaen sobre el trabajador. Para empezar a trabajar, tenés que empezar teniendo moto o bici, teniendo casco, patente al día en el caso de la moto, tener el monotributo al día, después tenés que pagarte tu propia cobertura por si te pasa algo, y en algunos casos como Glovo, te hacen pagar el uso de la aplicación”.

Pandemia y desprotección

Por último Marisa relató cómo les afectó la pandemia y que además se sienten aún más desprotegidos: “Para nosotros en la pandemia fue todo perjudicial porque desde el primer momento se declaró esencial el trabajo de reparto, pero no a los repartidores trabajadores. Nadie reconoce que somos trabajadores, solamente reconocen la esencialidad de la tarea. Fue mayor exposición por básicamente la misma plata y si en algún momento hubo un poco más de demanda después se compensó con la cantidad de gente que, como no tenía forma de salir a trabajar, se volcó a trabajar en las aplicaciones porque es de fácil ingreso. Nosotros hace dos años que no recibimos ningún aumento de pago por envío. Entre las aplicaciones va de $40 a $70 el pedido base y eso hace dos años que no se modifica”.

«No hay ningún protocolo para los trabajadores de reparto, al nivel que el único protocolo es cómo entregás el pedido al cliente o como podés retirar el pedido. En todos los gremios existe un protocolo para proteger a los trabajadores del contagio. En éste no existe nada porque ni siquiera somos considerados trabajadores, entonces, ni siquiera se esmeran en ver cómo hacer para que un trabajador no se contagie, siendo que los trabajadores de reparto, en muchos casos, estamos entrando y saliendo de los supermercados y yendo a las casas de la gente que está en cuarentena. En ese marco no hay ningún cuidado para el trabajador, ni para el resto de la sociedad que está utilizando la aplicación para abastecerse y estamos repartiendo el coronavirus por todos lados. No hay cobertura médica, no hay ART. Si te contagiás en la jornada laboral, exigimos un protocolo en donde a los trabajadores se los pueda aislar y que se les garantice un ingreso para poder hacer su cuarentena y obviamente una cobertura médica acorde a la situación de la pandemia. No solamente pedimos barbijos, alcohol en gel y guantes acorde a la cantidad de trabajadores de reparto que hay, sino un protocolo serio en donde no estén expuestos los compañeros a contagiarse, a contagiar a otros y a contagiar a sus propias familias. Como éste es un trabajo que si no trabajás, no comés, muchos compañeros elegirán hacer la vista gorda frente a sus síntomas, porque entre el hambre y el coronavirus a veces gana el hambre”, culminó.

Loading