Se atrincheró durante horas.
El hecho ocurrió el martes 3 de junio en un departamento del barrio porteño de Almagro. La Policía de la Ciudad montó un operativo especial y logró rescatar a la víctima y reducir al agresor con una pistola Taser.
Un dramático operativo policial se desarrolló este martes por la tarde en el barrio porteño de Almagro, donde un hombre de 45 años, en medio de un brote psicótico, se atrincheró en su departamento junto a su madre, a quien había herido y mantenía como rehén. El episodio ocurrió en un edificio de la calle Acuña de Figueroa al 900 y movilizó a distintas fuerzas de seguridad, servicios médicos de emergencia y especialistas en crisis.
El alerta se dio cuando el padre del agresor, y esposo de la víctima, llamó al 911 para advertir sobre el estado de su hijo, quien atravesaba una crisis psiquiátrica aguda y se encontraba armado con un cuchillo, junto a su madre dentro del departamento del octavo piso. Según detalló en su llamado, el hombre sufría de delirios de persecución y ya había manifestado conductas violentas.
Ante la gravedad del caso, se activó el protocolo de emergencia con la intervención del SAME, el Grupo Especial de Rescate (GER), los negociadores de la División Operaciones Especiales, el Grupo Especial DOEM y personal de la Comisaría Comunal 5. Al llegar al lugar, se conformó un Comité de Crisis que rápidamente se puso en contacto con el psiquiatra tratante del paciente, quien confirmó que tenía antecedentes de brotes psicóticos.
Mientras el agresor vociferaba amenazas de muerte hacia su madre y manifestaba discursos incoherentes, los negociadores intentaron establecer diálogo. Sin embargo, al no lograr una respuesta pacífica y bajo intervención judicial, se planificó una maniobra de ingreso táctico. Una cápsula del DOEM descendió con cuerdas desde la terraza del edificio hasta el balcón del departamento, logrando entrar por un ventanal sin ser detectados por el agresor.
Dentro del inmueble, los efectivos sorprendieron al hombre, quien tenía un cuchillo de cocina en la cintura. Fue inmovilizado mediante el uso de una pistola Taser, dispositivo que emite una descarga eléctrica capaz de incapacitar momentáneamente al individuo sin provocar daños letales.
La madre, en tanto, fue asistida en el lugar por personal del SAME. Presentaba heridas cortantes menores y un cuadro de hipertensión debido a la tensión vivida. El agresor fue trasladado al Hospital Alvear, donde fue diagnosticado con excitación psicomotriz y quedó internado bajo vigilancia psiquiátrica.
La causa judicial quedó en manos de la Fiscalía Criminal y Correccional N.º 24 y el Juzgado N.º 43, que ordenaron el secuestro del cuchillo y llevan adelante las actuaciones por “privación ilegítima de la libertad”. Aún no se determinó si el hombre será formalmente detenido, dado su estado mental al momento del hecho.
El operativo, que duró varias horas, fue clave para evitar una tragedia mayor y puso en evidencia la necesidad de articular respuestas rápidas y especializadas ante crisis de salud mental que derivan en situaciones de alto riesgo.
