Seguimos conociendo más sobre el Festival de Tango de Boedo. Esta vez entrevistamos a Adrián Placenti, el pianista que co-organiza el evento y va a participar en distintos segmentos. Además, nos cuenta sobre su nuevo proyecto a punto de salir.
Tintas de Boedo: Quinto año del festival, ¿cómo va a ser tu participación este año?
Adrián Placenti: Somos unos cuántos cabezas duras que venimos organizando este festival cada año y cada año cambia un poco. Es un espacio autogestivo donde nos interesa difundir lo nuestro, nuestra cultura, nuestra música, con dos lineamientos importantes: que esté ligado al barrio y que siempre hay que intentar promover las nuevas expresiones dentro del género. Mi participación es principalmente en la organización. Este año pensamos un ciclo de luthiers, que es algo que habitualmente no pasa, no se encuentra, que se desconoce, y nos parecía que era algo interesante compartir con el público. Los luthiers van a contar un poco acerca de los instrumentos, la fabricación, las curiosidades. En el ciclo de piano voy a estar coordinando y después en el fogón virtual del sábado haré alguna participación, un tema. Lo importante es que es un punto de encuentro para los que amamos el tango, es un momento para compartir.
TdB: ¿Cuál es la importancia de los festivales barriales?
AP: Pienso que surgen como una necesidad de encontrar canales en los cuales compartir y salir a mostrar lo que se está haciendo en una realidad en la cual hay que competir contra tanques que vienen de afuera y te pasan por arriba. Hay una necesidad de generar espacios donde poder desarrollar modos de expresión que nos son propios y que es un punto básico saber quiénes somos. Si nuestros artistas hablan de nosotros, cuentan nuestras penas, nuestras alegrías, nuestra realidad, pero no tienen lugar donde poder decir lo que llevamos dentro, estamos escuchando siempre lo que le pasa a la gente de otros lugares del mundo. Esto es una forma de intentar contrarrestar un poco eso.
TdB: ¿Qué características encontrás en el tango moderno?
AP: El tango actual tiene expresiones muy diversas. Hay una camada de músicos y músicas jóvenes muy talentosas, que han salido básicamente de los conservatorios de música popular que ya tienen muchos años mucha trayectoria. Muchos jóvenes se han acercado o redescubierto nuestro género, entonces, el tango tiene distintas expresiones. Hay todo un mundo que recrea los tangos de orquestas de otros tiempos que es una forma de mantener vivo lo que se hacía en otra época. Hay después muchos compositores y compositoras que van buscando por distintos lados. Hay una música más contemporánea, con más disonancia, hay otros que componen más a la manera tradicional, bien orientada al baile. Hay búsquedas. Hay músicos muy talentosos muy buenos.
TdB: ¿En qué proyecto personal estás actualmente?
AP: Terminé ahora un trabajo nuevo y estoy muy conforme, muy contento con lo que hice, es una apuesta más grande. Son dos obras grandes para piano solo de unos 20 minutos cada una, con 5 números. Las compuse el año pasado luego de unos meses de estar muy perdido de hacia dónde seguir. De alguna manera mezclé, mixturé, fusioné elementos de un subgénero musical que es el que se conoce como minimalismo, y elementos del tango. A este proyecto lo llamé “Minimal Piano Tango”. De las dos obras, una tiene un carácter muy tranquilo y muy reposado y se llama Equilibrium y la otra obra, que se llama Desequilibrium, tiene estados de ánimo distintos, mucho más enérgicos, más agresivos. Una obra es muy contemplativa y la otra tiene un punch distinto. Pero todo este trabajo tiene una esencia en ciertas características de la música minimalista que es ir hacia lo simple, hacia la reiteración de ciertas fórmulas, de ciertas características, ciertas formas musicales. En general, sobre todo en la primera obra están presentes las melodías porque es algo que me parece interesante. El disco va a estar editado dentro de pocos días y me parece que es algo un poco distinto.
TdB: ¿Cómo vivís la pandemia, las redes sociales y el no poder presentarse en vivo?
AP: Es muy complicado en general. A raíz de las redes, antes de la pandemia hice muchas giras en el exterior. Con las redes sociales fui llegando a gente, me fue muy útil. Pero durante la pandemia las redes se convirtieron en la única opción que teníamos. Eso me generó un rechazo, estuve meses sin compartir nada, muy ajeno a eso. Hice algún concierto online pero no es lo mismo que hacer un concierto presencial. Para este lanzamiento ahora estoy pensando una primera presentación virtual para cuando edite el disco, algo donde toque pero también explique de qué se trata y socialice un poco todo el trabajo. Y dejaré para más adelante las presentaciones en vivo.
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