
La nueva iniciativa vecinal del proyecto para “Castro Verde” mantendrá dos carriles para tránsito y uno para estacionamiento, como proponían las organizaciones vecinales de Boedo.
La agrupación vecinal “No destruyan Castro” confirmó a TdB que pudo alcanzar un primer acuerdo con funcionarios del Gobierno de la Ciudad para modificar el proyecto para la calle Castro del barrio de Boedo.
La propuesta alternativa que indican superadora e integral, incorporaría superficie verde a la calle sin la necesidad de cerrar tres de sus carriles, tal como proponía el gobierno local dentro del proyecto original.
Con este nuevo proyecto, se sumarían dos tramos de vereda exclusivamente verdes: uno de un metro de ancho para plantas nativas y otro de un metro y medio para arbolado. De esta manera se respetaría la fluidez del tránsito de la zona, lo que antes sí hubiese presentado una dificultad.
En diálogo con este medio digital, Soledad Gioia, vecina, paisajista e integrante de “No destruyan Castro”, expresó: “Consideramos en principio que la calle de por sí tiene un excelente potencial de arbolado público, algunos añejos pero en muy buenas condiciones. Hay mucha biodiversidad, se pueden ver aves como calandrias, horneros, e incluso un pájaro carpintero real”.
Por otro lado, Gioia detalló que “al haber cancelado el crédito del Banco Mundial por 327 millones de dólares y que al mismo tiempo el gobierno pretendía financiar la obra con fondos propios, fue que decidimos presentar una propuesta más acorde a lo que queríamos. Porque si aceptábamos el otro proyecto, iba a afectar a los vecinos frentistas y en general, sacando veredas, un carril de circulación quedando uno solo”.
Desde la Comuna N° 5 también manifestaron alegría por este acuerdo. “El proyecto que presentaron estuvo muy bien fundamentado y también reconocieron en sus redes la labor de acompañamiento que hizo nuestra área de Atención Vecinal y cómo insistimos para que las reuniones se lleven a cabo. Fue un laburazo la verdad”, señaló Nicolás Cabrera, en diálogo con TdB.
“Además, el pasto no genera ningún beneficio eco sistémico a lo que es el espacio urbano. Iba a ser muy difícil de mantenerlo como tal y se iba a generar barro también”, continuó describiendo Gioia.
Quieren ahora seguir este camino generando corredores verdes con este caso de Castro como ejemplo bandera, luego de toda la lucha puesta al servicio de ese proyecto inicial que resistieron por inconsulto.
Las obras podrían comenzar en febrero y se aguardan con mucha expectativa.

Redactor de www.tintasdeboedo.com.ar