Se acerca Semana Santa y Boedo y María Franco lo saben.
En el barrio de Boedo hay muchos lugares que pueden ser denominados instituciones, ya sea por su cantidad de años en el barrio o la importancia en el mismo, la confitería y repostería María Franco, situada en Avenida Boedo al 2059 entre Chiclana y Caseros, reúne ambas condiciones. Le consultamos a Rafael Franco, dueño, socio y miembro, la historia del lugar y como hacen los huevos de pascua que son un éxito no solo a nivel barrial sino también nacional.
“Hace 24 años que iniciamos nuestras actividades y hemos crecido bastante en el medio de todo este proceso”, contó Franco.
En el 2020, que se vivió en pandemia, indicó que fue un momento complicado para ellos, se manejaban por delivery, ellos entregaban y tuvieron que redoblar esfuerzos. Pudieron transitar ese momento sin demasiadas complicaciones. Se solidariza con los que no pudieron aguantar sus negocios o los que tuvieron que reducir actividades o gente que trabaja para poder paliar económicamente el negocio.
Hace 20 años que realizan los huevos de pascua, cada inicio de marzo se palpita esas fechas, “Semana Santa”. No sólo por lo que se festeja e implica para las distintas religiones, sino también por lo que se come, los famosos y conocidos huevos de pascua. María Franco se destaca por hacer los huevos gigantes, miden 1,80 de altura y puede llegar a pesar 70kg. “Los dimensionamos en esta medida máxima como para que entre por una puerta grande, también hemos hecho en alguna oportunidad y han pedido de 2 mts, pero el transporte de estos tamaños es muy complejo. No está de más aclarar que tenemos medidas mucho más razonables”.
Señala que fueron creciendo y aprendiendo en el tema tamaño ya que es muy difícil modelarlos y que se puedan mantener parados. Requiere un esfuerzo grande para encontrar la solución. Además, aclara que los más grandes, es decir, más de 70 kg se vuelven inmanejables. Los días que el negocio abre es de lunes a sábado de 9 a 14 hs y 17 a 20 hs.
Manifestó que no es todo el año lo de los huevos de pascua, que es un momento pero que son meses difíciles por lo que conlleva la cantidad de chocolates, los kilos de chocolate que tienen que preparar. Vale aclarar que no solo venden huevos, sino también las tablas, los bombones y alfajores. El chocolate es su fuerte.
Rafael Franco contó cuál es su expectativa de ventas para este año: “A pesar de los tiempos críticos que estamos viviendo, somos muy optimistas ya que la preventa realizada en el mes de febrero fue exitosa. Sabemos que en unos días más nos vamos a quedar sin chocolate, pero realizamos una reserva de producto para abastecer a nuestros clientes habituales que desde hace años se acercan a nuestro negocio. Nos pareció justo acompañar a estos clientes y amigos fieles que desde hace 20 años vienen a buscar nuestros productos”.
“El éxito de nuestra actividad, hoy sin duda es producto del valor de los huevos de pascua que son absolutamente accesibles y que están a precios increíblemente económicos frente a los precios que manejan los oligopolios, ejemplo Arcor, que concentra gran parte de la venta y los productos de ellos están a precios siderales”, sentenció Rafael Franco.
